
El dios más rápido del Olimpo corre sobre el Sol
Ya no disfrutamos del cielo como antes. Pocos lectores de este artículo habrán visto Mercurio a simple vista. Mercurio es muy pequeño. Ganímedes, una de las cuatro lunas Galileanas, es mayor que él. Podemos verlo brillar a simple vista como una estrella al amanecer o al atardecer, siempre próximo al Sol, ya que su órbita es bastante cercana a nuestra estrella. También es visible a simple vista durante un eclipse total de Sol. Sin embargo, en el pasado, las cosas eran distintas. Los astros jugaban un papel fundamental en la vida cotidiana. Existen referencias al planeta Mercurio desde hace
Alfredo Rafael
Rosenberg González
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