Orión, el cazador, es una de las constelaciones más conocidas del cielo. Justo por debajo del cinturón, su espada esconde un tesoro, la espléndida Nebulosa de Orión. Este objeto, también conocido como M 42, es un amplio complejo de gas y polvo, iluminado por varias estrellas masivas y calientes en su núcleo, las estrellas del Trapecio. Para los astrónomos, la Nebulosa de Orión, situada a unos 1.500 años luz de la Tierra es uno de los objetos más importantes, ya que contiene una de las regiones de formación estelar más activas y cercanas en la Vía Láctea, nuestra galaxia.