Fecha de publicación
Referencias
2013, García-Hernández & Díaz-Luis 2013, A&A, 550, L6
Se ha hallado evidencia de que la presencia de “cebollas de carbono” y otras grandes moléculas derivadas de los fullerenos podría ser generalizada en el espacio. Se trata de las moléculas más complejas observadas hasta el momento y su hallazgo tiene importantes implicaciones para entender la físico-química circunestelar e interestelar, así como los procesos moleculares en los últimos estados de la evolución estelar. El trabajo aporta nuevas claves para entender el origen y composición de las bandas difusas interestelares (DIBs), uno de los fenómenos más enigmáticos en astrofísica. Descubiertas hace 90 años, las DIBs están presentes en todas las direcciones del espacio (se conocen más de 400), son más intensas en aquellas zonas con abundante polvo interestelar y se caracterizan por atrapar parte de la luz visible emitida por las estrellas. Al estudiar el espectro óptico de dos nebulosas planetarias, se ha encontrado que dos de las DIBs conocidas se mostraban especialmente intensas y que aparecía una nueva banda no conocida hasta el momento. Las observaciones concuerdan con estudios teóricos previos sobre fullerenos grandes y complejos (cebollas de carbono o fullerenos multicapa como C60@C240 y C60@C240@C540) y su hipotético comportamiento en el espacio. De esta forma, los fullerenos en sus diversas manifestaciones (cebollas de carbono, cúmulos de fullerenos, o incluso especies complejas formadas por fullerenos y otras moléculas como hidrocarburos o átomos) podrían tener la clave para resolver el misterio de los DIBs. Desde hace un tiempo se sospechaba que las DIBs podrían estar generadas por moléculas basadas en carbono. Las observaciones confirman esta teoría y apuntan además a una clase especial de molécula de carbono, los fullerenos complejos (cebollas de carbono o fullerenos multicapa).