El Instituto de Astrofı́sica de Canarias (IAC) ha acogido la visita del profesor Didier Queloz, premio nobel de fı́sica y codescubridor del primer exoplaneta que orbita una estrella similar al Sol. La estancia del profesor Queloz en el IAC ha estado centrada en el desarrollo instrumental y la colaboración tecnológica. Como parte de su agenda, también ha impartido la conferencia “Exoplanetas: la próxima frontera” en el Aula del IAC.
El investigador ha visitado el IAC con el objetivo de supervisar la instalación de un nuevo espectrógrafo de alta estabilidad en el Telescopio Isaac Newton (INT) del Observatorio del Roque de los Muchachos, en La Palma. Este equipo se enmarca dentro del proyecto Terra Hunting Experiment (THE), cuyo enfoque principal es la detección y caracterización de exoplanetas de tipo terrestre alrededor de estrellas de tipo solar. En el contexto de esta colaboración, Queloz ha mantenido reuniones con investigadores del Laboratorio de Innovación en Opto-Mecánica (LIOM) para examinar el avance en el desarrollo de tecnologías ópticas y la integración de instrumentación avanzada.
El legado de un Premio Nobel
Didier Queloz recibió el Premio Nobel de Física en 2019, junto a Michel Mayor, por el descubrimiento de 51 Pegasi b, el primer planeta detectado fuera de nuestro sistema solar orbitando una estrella tipo solar. Este hallazgo, realizado en 1995 mediante la técnica de velocidad radial y gracias a la creación de un espectrógrafo de precisión desarrollado durante su doctorado, inauguró una nueva era en la astronomía moderna: la ciencia de los exoplanetas. Desde entonces, más de 6.000 mundos han sido identificados, transformando radicalmente nuestra visión del cosmos y del lugar que ocupa la Tierra en él.

Tres ideas clave de su conferencia
En su presentación, el científico ha abordado varias ideas clave sobre la búsqueda de exoplanetas. Queloz ha comenzado destacando la diversidad planetaria y la noción de un “universo generoso”. “El universo ha sido generoso con nosotros —ha afirmado—, porque nunca imaginamos la enorme diversidad de planetas que existirían”. El científico ha explicado que esta variedad no implica que la Tierra sea única, sino que existen múltiples caminos posibles para la formación planetaria.
El científico también ha subrayado los límites de las técnicas actuales de detección —como los tránsitos y las velocidades radiales— y la necesidad de avanzar hacia métodos de imagen directa y análisis atmosférico. “Tenemos que pasar a la imagen directa; no hay otra vía”, ha insistido, señalando que el futuro de la astrofísica planetaria dependerá de instrumentación óptica avanzada y telescopios de nueva generación.
Por último, Queloz ha defendido la idea de que la vida podría ser una consecuencia natural del universo, siempre que las condiciones planetarias sean favorables durante el tiempo suficiente. “La búsqueda de vida ya no es solo astronomía, es también geofísica y química”, ha señalado. Y ha concluido su intervención con una visión inspiradora: “Un día haremos una imagen directa de otro planeta como la Tierra, y será un momento histórico para la humanidad.”

Encuentro con LIOM y sinergias tecnológicas
Durante su visita, Queloz ha mantenido una reunión de trabajo con el equipo de LIOM del IAC, donde se han debatido posibles sinergias en instrumentación avanzada, en especial en áreas como óptica adaptativa, interferometría de cancelación, fotónica e inteligencia artificial aplicada al control de telescopios.
El encuentro ha coincidido con los preparativos para la llegada del prototipo del telescopio Small ELF, un instrumento de 3,5 metros desarrollado por el LIOM para probar tecnologías que permitirán en el futuro observar directamente atmósferas de exoplanetas y buscar biomarcadores.
Durante su interacción con el equipo técnico, el profesor Queloz ha mostrado un manifiesto interés por los desafíos asociados a la instrumentación, planteando cuestiones relevantes sobre la alineación de los espejos del telescopio. En este contexto, se ha referido al proyecto SELF/ELF como una "gran aventura científica", y ha extendido sus deseos de éxito al equipo responsable de su desarrollo.
La visita de Didier Queloz refuerza el compromiso del IAC con la ciencia de frontera, la colaboración internacional y el desarrollo de tecnologías ópticas punteras que acercarán a la humanidad a responder una de sus preguntas más profundas: ¿Estamos solos en el universo?
