Las distintas agrupaciones de galaxias que conforman el Universo se clasifican en varias categorías según sus dimensiones y el número de galaxias que contienen. Los Grupos de Galaxias son los más sencillos, y suelen estar formados por unas decenas de miembros de diversa morfología y tamaño, ligados gravitacionalmente y que interaccionan de forma frecuente. En estos grupos de galaxias predomina el “canibalismo galáctico”, proceso en el que las más pequeñas van siendo atrapadas y absorbidas por las más masivas debido a su mayor atracción gravitatoria. En este momento de la historia del Universo, nuestra galaxia ha capturado a la galaxia irregular enana de Sagitario, que pasará a mezclarse de forma indistinguible con el resto de sus estrellas en un futuro próximo. Incluso las dos mayores galaxias espirales del Grupo Local – M31 y la Vía Láctea – se fundirán en una sola en un colosal abrazo que comenzará en algunos miles de millones de años.
El Grupo de M81 es el Grupo Galáctico más próximo al nuestro, situado a unos 12 millones de años luz. Esta pequeña distancia nos convierte en vecinos dentro del Cúmulo de Galaxias de Virgo (#9). En la imagen, destacan dos galaxias (M81 y M82), que danzan la una en torno a la otra. Ambas definen el núcleo que aglutina al resto del grupo, compuesto por al menos 34 galaxias, de las que podemos ver 5 más en esta imagen (Holmberg I, NGC2976, Holmberg IX, NGC3077 y UGC5423). M81 es también conocida como la “Nebulosa de Bode” o NGC3031, una galaxia espiral de dimensiones similares a la nuestra. Por su parte, M82 también recibe el nombre de “Galaxia del Cigarro” o NGC3034, una galaxia con un núcleo activo que presenta intensos brotes de formación estelar y en cuyo centro se ha encontrado un Agujero Negro Supermasivo de 70 millones de masas solares. Aparentemente distantes medio grado en el cielo, M81 y M82 se encuentran realmente separadas por unos 150.000 a.l., ni una décima parte de la distancia que nos separa de Andrómeda.
No obstante, señaladas mediante un pequeño cuadrado, en la imagen todavía pueden identificarse otras galaxias más lejanas, catalogadas como NGC2959 y NGC2961. Éstas se encuentran a unos 200 millones de a.l., lo que significa que los fotones capturados por la cámara partieron desde esas lejanas galaxias entre los periodos Jurásico y Triásico, en pleno reinado de los dinosaurios sobre la Tierra.
Otro elemento que se distingue en esta imagen son las nubes de polvo y gas con aspecto fibroso. Presentes por toda la galaxia, son extraordinariamente débiles, dejándose ver tan solo desde cielos especialmente oscuros, como los de los Observatorios de Canarias. A diferencia de las regiones de formación estelar, que se muestran con un marcado color rojo debido a la emisión de luz por parte del hidrógeno, estas nubes se muestran en colores más neutros, puesto que están siendo iluminadas por el lejano brillo de las estrellas de nuestra galaxia reflejado por el gas y polvo que las compone. Como las numerosas estrellas individuales presentes, estas nubes forman parte de nuestra galaxia, la Vía Láctea.
El mapa estelar muestra el área cubierta por la imagen, representada mediante un cuadrado rojo que se encuentra sobre la cabeza de la constelación de la Osa Mayor.
La imagen es el resultado de sumar 12 exposiciones de 900s en cada uno de los 3 filtros anchos R(rojo), G(verde) y B(azul), más 40 exposiciones de 1.200s en el filtro L(luminancia) con el Astrógrafo Sky Treasure Chest (STC) de la UC3. Autor: D. López ©IAC
La imagen es el resultado de sumar 12 exposiciones de 900s en cada uno de los 3 filtros anchos R(rojo), G(verde) y B(azul), más 40 exposiciones de 1.200s en el filtro L(luminancia) con el Astrógrafo Sky Treasure Chest (STC) de la UC3. Autor: D. López ©IAC