Las galaxias, en todas sus formas, desde espirales hasta elípticas, gigantes o enanas, han sido ampliamente estudiadas durante los últimos 100 años. Para sorpresa de la comunidad científica, el año pasado fue descubierto un nuevo tipo de galaxia residiendo en una metrópolis galáctica conocida como Cúmulo de Coma, a 300 millones de años luz de la Tierra. A pesar de ser una población muy numerosa, estas galaxias ultradifusas habían pasado inadvertidas hasta la fecha dado su bajo brillo. Sus estrellas, que se encuentran muy repartidas a lo largo de una gran superficie, hace muy difícil distinguirlas del propio fondo del cielo.
“Estas galaxias son particularmente interesantes dado que el violento entorno en el que se encuentran ya debería haberlas destruido, a no ser que estén protegidas por una gran cantidad de materia oscura” indica Mike Beasley, el autor principal del artículo publicado en la revista Astrophysical Journal Letters. “Comprobar esta fascinante idea fue posible tras identificar una galaxia ultra difusa lo suficientemente cercana como para estudiarla en detalle.”
Dicha galaxia, VCC 1287, está situada en el Cúmulo de Virgo, a unos 50 millones de años luz de distancia, y aparece rodeada por un enjambre de cúmulos globulares, elemento clave a la hora de estudiar su contenido en materia oscura. “Los cúmulos globulares -formados por cientos de miles de estrellas- orbitan bajo la influencia gravitatoria de la galaxia ultra difusa” añade Aaron Romanowsky, de la San José State University (EEUU) y otro de los autores del artículo. “Cuanto más pesada es una galaxia, más rápido se mueven sus cúmulos globulares, siendo el equivalente a una pesa cósmica.”
Usando el Gran Telescopio CANARIAS (GTC), el equipo descubrió cómo estos cúmulos globulares se mueven a gran velocidad, atraídos por un campo gravitatorio sorprendentemente fuerte. “A pesar de que la materia oscura está también presente en otras galaxias, este es un caso excepcional”, concluye Beasley. “Por cada kilogramo de materia ordinaria, VCC 1287 contiene 3 toneladas de materia oscura.”
Por tanto, se puede decir que las galaxias ultradifusas están compuestas casi íntegramente por materia oscura, siendo mínima la presencia de estrellas. Esta conclusión plantea a los científicos una nueva pregunta: ¿cómo es posible que existan galaxias tan difusas y oscuras?
Artículo: “An overmassive dark halo around an ultra-diffuse galaxy in the Virgo cluster”, por Michael Beasley (IAC-ULL), Aaron J. Romanowsky (San José State University-University of California Observatories), Vincenzo Pota (INAF, Osservatorio Astronomico di Capodimonte), Ignacio Martín Navarro (IAC-ULL-University of California Observatories), David Martínez Delgado (Universitat Heidelberg), Fabian Neyer ETH Zurich) y Aaron L. Deich (San José State University), 2016, ApJ Letters, 819, L20.
http://stacks.iop.org/2041-8205/819/L20
Contacto:
Mike Beasley: beasley [at] iac.es