Históricamente, los mapas celestes han sido la principal fuente de datos astronómicos, utilizados para explorar y comprender el Universo. Este trabajo está dedicado al estudio de uno de ellos, Lockman-SpReSO, un seguimiento espectroscópico óptico cartográfico de fuentes seleccionadas por su emisión infrarroja, a partir de observaciones previas con
Mauro González Otero